Y un día nos fuimos otra vez a la playa.
Luego de la boda siempre está bueno darle una nueva chance al vestido para hacer esas fotos frescas, divertidas y descontracturadas. Y eso es lo que hicimos con Angie & Pablo, volver a charlar de la boda, disfrutar de una hermosa locación y pasar un día capturando imágenes que cierran uno capítulo mas de esta historia que estamos escribiendo juntos hace meses.
Hacía frío? Sí! Y le pusimos mucha onda, toda la que existe en el mundo para que ese vestido luciera una vez más antes de ir a dormir su justo sueño, que lo tiene bien ganado!
Gracias por sumarse y atreverse a pasarla bien y exprimir la experiencia de la boda hasta el último minuto juntos.
